Guest User
June 28, 2024
Las instalaciones del hotel son cómodas y agradables, gran parte del mobiliario es realizado por habitantes de la isla. Las habitaciones son impecables, es importante tener en cuenta que el baño es al aire libre, lo cual hace que sea una experiencia diferente. En la isla no hay agua potable, sin embargo, hay dispensadores en el restaurante. El hotel cuenta con zona de juegos, restaurante, bar, acceso directo al mar, spa, zonas de descanso, entre otras, lo que permite aprovechar la estadía. De igual forma, cada día se programan diferentes actividades recreativas, así como actividades en el mar, que estas en su mayoría tienen un valor extra. Desde la experiencia durante mi estadía, considero que una oportunidad de mejora podría ser diversificar un poco más las actividades gratuitas del hotel. El desayuno, el almuerzo y la cena suelen ser en modalidad de buffet, sin embargo también se puede pedir a la carta. Las opciones son variadas, para el buffet ofrecen sopa, distintos tipos de acompañamientos, tres opciones de proteína, postres y dos opciones de bebida. La cocina es limpia y organizada, lo cual brinda al huésped una sensación de tranquilidad y confianza a la hora de consumir alimentos en el hotel. Considero que un aspecto a mejorar podrían ser los horarios en los cuales se brinda el servicio de alimentación, ya que, por ejemplo, de 9:30 a 11 no se puede acceder ni al buffet, ni a los snacks. Debo resaltar que uno de los días de estadía pedimos comida después de las 9:30pm, pero ya estábamos fuera del horario de servicio de cena, sin embargo, y a manera de excepción, hicieron lo posible por brindarnos algo para comer. Si bien el hotel en general es una excelente opción, lo que más quisiera resaltar es el servicio que nos brindaron. William nos dio la bienvenida y se mostró siempre pendiente y colaborador. Santiago con su energía, su conocimiento, su disposición y su enfoque social, nos permitió disfrutar la isla de una manera diferente. Jesica y Fabio en recepción fueron sumamente amables, de igual forma Jesica fue de gran ayuda para poder realizar un cambio de habitación. Pablo, Diego y Laura en el área de cocina y bar, fueron muy atentos y pacientes. Se me escapan varios nombres más, sin embargo, todas, absolutamente todas las personas encargadas del servicio hicieron de nuestra estadía una gran experiencia. En conclusión, recomiendo esta opción de hospedaje en Isla Mucura para quienes quieran desconectarse de la cotidianidad en un lugar hermoso y tranquilo.
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