yipsam
August 21, 2022
nos alojamos varios días, el hotel está en una zona muy bonita y tiene amplio aparcamiento, tanto delante como por detrás del restaurante. Desayuno variado, un día había mini chistorra, otro huevos revueltos con bacon...bollería, pan casero y de molde, mermeladas y mantequilla, cereales de copos de chocolate, botes de tomate rallado y aceite...de todo un poco. La habitación que cogimos fue la del ático, unas vistas increíbles al levantarte, el techo es abuhardillado pero no te das en la cabeza, es alto. Por la noche había bastante jaleo porque da al restaurante y las paredes parecían de papel también, oyes todo lo de al lado. La cama hiper blanda y las almohadas muy bajas. Cenamos 2 noches en el restaurante, la primera no acertamos, la camarera no nos comentó cómo eran las raciones y pedimos muchísimo. Al día siguiente, ya íbamos escarmentados. Precio medio alto pero las raciones y la calidad muy buena. Mención especial al solomillo y la tarta de la abuela, menudos trozos nos comimos, buenísima, con sabor fuerte a chocolate. La pedimos 2 noches seguidas. El servicio es lentísimo, tardan mucho en traerte los platos pero salvo por eso, nos parece un acierto tener un restaurante justo debajo para poder bajar a cenar sin desplazarte. Si volvemos, repetiremos hotel.
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