Il Belvedere

Equipe de atendentes (recepção, bar e restaurante muito bem preparados e atenciosos. Estrutura dos bangalôs, piscina muito boa. Cafe da manhã excelente com boa variedade de pães, queijos, ovos, frutas e sucos. O Fitness center 24 hs é um diferencial muito bom para quem está na cidade a negócios

Una reserva que hice a último momento, atención personalizada por wp, y al día siguiente hice un web check In que agilizó mucho la llegada. La cabaña hermosa y súper cómoda. La verdad súper recomendable el lugar. Cerca de la playa brava y de la barra.

La ubicación es excelente se encuentra sobre la brava, estas a menos de 5 minutos de La Barra (hermoso lugar para pasear de noche), y a 5 minutos de la peninsula, en cuanto a la playa el hotel cuenta con servicio de reposeras, sillas y sombrillas en la playa misma, con un asistente, más el servicio de toallas de playa que brindan el hotel (Esto es excelente). Las cabañas son super limpias, y comodas, muy insonoras y privadas, estacionas el auto practicamente en la puerta, tenes parrilla, cocina con todos los utensillos, las camas son muy comodas, y los baños a la altura de un 5 Estrellas, el parque y las instalaciones muy limpias y hermosas decoraciones; El desayuno formidable Frutos secos, frutas frescas, omelettes, tostados, wafles, etc..., el personal de todo el complejo es muy amable y atento, es super limpio todo, recomendable al 100%. Las comidas, en el hotel (precios 2024) son U$S 25, por persona, aproximadamente, y tienen la posibilidad de enviar tanto desayuno, como almuerzo y cena a la cabaña. IMPORTANTE: Rafael, quien atiende el resto de noche, es una excelente persona y por ser nuestra primera vez en Punta del Este, sus charlas nos orientaron para nuestros paseos, también a la hora de irnos, salimos de noche y tuvo un gestó con nuestra familia muy, pero muy bueno... es difícil de explicar en palabras nuestra gratitud con el hotel, pero sobre todo con esta persona... Gracias por tan maravillosa experiencia.

El personal muy amable, la cama y almohadas muy cómodas, habitaciones muy bien equipadas. El restorán muy bueno, el único detalle es que no tiene muy buena acústica, si hay niños se vuelve muy ruidoso. Un lugar que transmite paz realmente.

Fui con mi esposo y mi bebé de un año al bungalow que cuenta con parrillero. El lugar es muy pintoresco y está muy bien cuidado, pero la cabaña deja mucho que desear para lo que vale. El sillón (si se le puede llamar sillón) es más bien una mini cama marinera, con un colchón durísimo y dos almohadones. Cero comodidad si la idea es pasar un día de frío dentro de la cabaña. La televisión si bien es smart , es chica y todo funcionaba lento. Le falta una piscina cerrada, que si bien es climatizada está al aire libre. el desayuno es muy rico y tiene muchas opciones. En cuanto al restaurante pedimos a la habtiacion y nos pareció muy mal servido para el costo de los platos (tres papas fritas de guarnición) . Creo que son cosas que restan mucho a lo que es la imagen del hotel pero que serían corregibles con muy poco Volvería a ir si mejoraran lo antes comentado, porque en general es muy lindo y el personal muy amable.